Encontrada una inscripción de "Jesús hijo de María", en una antigua iglesia de Israel
Cuando Jesús estaba a punto de entrar en Jerusalén, días antes de su crucifixión, las multitudes celebraron su llegada gritando: “Bendito sea el Rey que viene en nombre del Señor”. A algunos fariseos cercanos no les gustó eso y le pidieron: “Reprende a tus discípulos”. A lo cual Jesús respondió: “Les aseguro que si ellos callan, gritarán las piedras”. Unos 2000 años después, una piedra fue desenterrada en Taiba, en el norte de Israel, que ciertamente parece estar gritando. Desvelada recientemente, contiene la inscripción griega “Cristo nacido de María”. La Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA) anunció el 30 de diciembre que la inscripción estaba grabada en la entrada de un edificio del periodo bizantino o islámico temprano. La piedra fue descubierta en un edificio ornamentado de uso secundario. “La importancia de la inscripción es que, hasta ahora, no sabíamos con certeza que hubiera iglesias de este periodo en esta área”, contó Walid Atrash, arqueólogo de la IAA, al periódico